El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha visitado las obras que conectarán la carretera TO-20 con la Ronda de Buenavista, una intervención que busca mejorar la fluidez del tráfico en esta zona clave de la ciudad. Este proyecto, que se desarrolla al oeste de Toledo, forma parte de un plan urbanístico destinado a optimizar la circulación y accesibilidad en una de las áreas con mayor tránsito.
La actuación urbanística abarca una superficie de 15.561 metros cuadrados y está delimitada al norte por la TO-20, al sur por la carretera N-430 y la zona urbana consolidada, al este por otra área urbana, y al oeste por la TO-20 y una tercera zona habitacional. El proyecto incluye, además de la conexión vial, la construcción de dos bloques de viviendas, lo que contribuirá al desarrollo de la ciudad.
El origen de esta intervención se remonta al Plan Especial de Reforma Interior, aprobado por el Ayuntamiento de Toledo dentro del ahora anulado Plan de Ordenación Municipal (POM) de 2007. En ese momento, la zona fue designada como Unidad de Actuación UA38, aunque no se ejecutó debido a que el consistorio exigió la construcción de un carril paralelo de incorporación a la TO-20 como requisito para la conexión.
El objetivo principal de este proyecto es formalizar y completar el frente sur de la Ronda de Buenavista, mejorando la comunicación con la circunvalación TO-20. Además de las infraestructuras viales, se incluirá una nueva conexión peatonal, facilitando así el tránsito tanto de vehículos como de peatones.
Este nuevo viario, que será perpendicular a ambas vías principales, promete aliviar la congestión en esta parte de la ciudad y mejorar la calidad de vida de los toledanos. La intervención urbanística es una apuesta del gobierno local por el desarrollo sostenible y la mejora de las infraestructuras de movilidad en Toledo.