El Mundial femenino de fútbol que se celebra en Australia y Nueva Zelanda, entre el 20 de julio y el 20 de agosto, ya ha vendido más de 1,5 millones de entradas en cinco días de competición, por lo que va a camino de ser el que más afluencia de público en las gradas ha tenido en la historia del torneo.
Los primeros 12 partidos disputados han contado con casi 364.000 espectadores, lo que supone una media de 30.326. Esta cifra supera ampliamente los 21.756 de media del torneo celebrado en Francia en 2019 y la media histórica del Mundial de 24.780, según anunció la Federación Australiana de Fútbol este martes.
Estos datos de los primeros 12 partidos confirman un aumento del 72 por ciento en asistencia en comparación con Francia 2019, una muestra de que la popularidad del fútbol femenino sigue creciendo a nivel global. El Director Ejecutivo de la Federación, James Johnson, se mostró «encantado» ante un torneo que está «haciendo historia» y superando todas sus expectativas.
«Estamos viendo un aumento del apoyo al fútbol femenino, no sólo en la venta de entradas, también en la audiencia de las retransmisiones, la participación de los aficionados y la venta de artículos», celebró.
La FIFA también confirmó que ya se han vendido más de 1,5 millones de entradas en estos primeros cinco días desde que arrancó el torneo, un gran dato que podría convertir al Mundial de Australia y Nueva Zelanda en la Copa del Mundo con más público en sus gradas en toda la historia de la competición.