El piloto español Carlos Sainz, que compite con el equipo Williams, ha declarado que la escudería está en una «trayectoria ascendente» y que es esencial no caer en el estancamiento mientras se preparan para la próxima temporada de Fórmula 1. Sainz también ha afirmado que los resultados obtenidos en 2025 justifican su decisión de unirse a Williams.
Carlos Sainz reflexiona sobre su temporada con Williams
En una entrevista concedida a los medios oficiales de la Fórmula 1, Sainz comentó: «Si me hubieran dicho a principios de año que Williams terminaría quinto al final del campeonato, recortando distancias con los equipos punteros y logrando un par de podios, lo habría aceptado. En general, ha sido un buen año. Si en el verano de 2024, cuando firmé con Williams, les hubiera dicho que estos resultados iban a suceder, no me habrían creído del todo. Ahora tengo los resultados que respaldan por qué elegí este equipo, una reivindicación».
Áreas de mejora en el equipo
El piloto madrileño también destacó que existen muchas áreas en las que Williams se encuentra «más cerca de la cima» de lo que esperaba, aunque también reconoció que hay otros aspectos en los que están «muy por detrás». «Hay grandes contrastes en este equipo. Cuentan con gente increíblemente talentosa y con buenas ideas, pero también hay aspectos como procesos, herramientas y simulación en los que estamos muy rezagados. Todos estamos trabajando arduamente para desarrollar esas debilidades y asegurarnos de ser un equipo de primer nivel», explicó.
Transparencia en la comunicación
Sainz elogió la honestidad del equipo en cuanto a sus debilidades: «En la dirección siempre fueron muy claros conmigo. Me informaron sobre todas las debilidades, no me encontré con ninguna sorpresa desagradable y afronté la situación con realismo, sabiendo que lo único que podía hacer era dar lo mejor de mí para intentar ayudar».
Un futuro prometedor para Williams
El piloto confía en que el equipo se mantenga en su camino de mejora. «Es fundamental mantenerla. Es importante seguir mostrando progreso y no estancarlo. Con un cambio de reglamento tan grande, ese progreso podría ser diferente el año que viene, porque será impredecible saber dónde estará cada uno. Pero confío en lo que está haciendo el equipo, en el esfuerzo que hemos dedicado al coche del año que viene con las sesiones de simulador y el trabajo de desarrollo. Me siento positivo. Estoy relativamente contento y confiado», subrayó Sainz.
Recuerdos de su primer podio
El piloto también recordó su primer podio con Williams en Bakú: «Hubo dos cosas de Bakú que realmente disfruté. La primera fue darles a todos los mecánicos y a Williams el primer podio en muchos años. Para mí, fue una validación. Había tenido una primera mitad de año difícil, y no dejaba de decirle a la prensa que era rápido y que solo me faltaban resultados para demostrarlo. Decía ‘todo va a llegar’, pero los resultados no llegaban».
En cuanto a la experiencia de subir al podio, Sainz expresó: «Cuando tuve la oportunidad de subir al podio, la aproveché y pude decir ‘esto es lo que vine a hacer’. También me sentí muy cómodo compitiendo por un podio de nuevo. Después de seis meses sin subir al podio, uno piensa ‘¿estaré un poco nervioso o un poco oxidado?’, pero aproveché la oportunidad».
Adaptación al equipo y desafíos
Finalmente, Sainz habló sobre su proceso de adaptación a Williams: «Con el talento y la velocidad que hay hoy en día en la Fórmula 1, enfrentarme a Alex Albon en un Williams, Charles Leclerc en un Ferrari o Max Verstappen en un Red Bull, que conocen sus coches al dedillo, es muy difícil llegar y estar inmediatamente a ese nivel. En el mejor de los casos, puedes igualarlo o mejorarlo un poco, pero al ser nuevo en un equipo, generalmente estarás un paso por detrás en cada sesión de entrenamientos libres, en cada sesión de clasificación y en cada Gran Premio».
El piloto concluyó: «Para rendir en la Fórmula 1, necesitas equilibrio, y durante los primeros seis meses en un equipo hay muy poco equilibrio. Solo necesitas paciencia, confiar en el proceso y saber que, en algún momento, todo va a encajar».
