El nuevo presidente y máximo accionista del RCD Espanyol, el empresario estadounidense Alan Pace, se presentó este martes ante los medios en el Auditorio del RCDE Stadium, donde compartió su entusiasmo por liderar el proyecto blanquiazul. Pace declaró que su «sueño» de estar al mando del club «ya está vivo» y que su ambición es posicionar al Espanyol «entre los seis grandes de España» mediante un modelo de gestión «honesto, sostenible y con mentalidad ganadora».
Un objetivo claro: ser parte del ‘Top 6’
Durante su presentación, Alan Pace enfatizó la importancia de que el Espanyol sea reconocido como uno de los seis mejores clubes de España. «Que este club forme parte del ‘Top 6’ en España sería un éxito. Lograr más que eso sería otro sueño, pero el verdadero éxito es que se nos trate como a los grandes», afirmó. Además, destacó su deseo de «ser considerado parte de la familia del Espanyol».
Una transición significativa
El empresario, quien lidera el grupo Velocity Sports Partners (VSP), brazo inversor deportivo de ALK Capital y propietario del Burnley FC desde 2020, expresó su agradecimiento al Rastar Group y al anterior presidente del club, Chen Yansheng, por su gestión durante la transición. «No es una simple transacción; es algo mucho más significativo. El fútbol es una fuerza generosa que conecta a personas, familias y culturas, y mantiene vivos los sueños», comentó Pace, quien aclaró que su llegada no implicará un cambio drástico, sino una consolidación del proyecto existente. «No venimos a cambiar lo que es el Espanyol; venimos a fortalecerlo y ayudarlo a crecer», añadió.
Compromiso con el club y la cantera
Pace subrayó que su compromiso se basa en trabajar con «honestidad, humildad, total implicación» e invertir en la cantera, infraestructuras y personas. Además, garantizó «la independencia del club» y una gestión «con claridad y buenos propósitos». En este contexto, explicó que el crecimiento del club no depende únicamente de la inversión económica. «Crecer no significa solo dinero. La mentalidad no es ‘vamos a gastar mucho’, sino que crecer es una mentalidad», afirmó.
Colaboración en el ámbito deportivo
Con respecto al equipo, Pace mostró confianza en el director deportivo, Fran Garagarza, y en el entrenador Manolo González. «Pensamos en positivo. Vamos a escuchar a la dirección deportiva y mirar opciones. Queremos cumplir las reglas y tomar decisiones inteligentes», expresó en relación con la planificación deportiva, con la vista puesta en el mercado de invierno.
Sinergias con el Burnley FC
Al ser preguntado sobre las similitudes con el Burnley FC, Pace indicó que ambos clubes serán «una familia», como «hermanos que no son iguales». «Hemos aprendido cosas que quizá podamos aplicar aquí. Hay posibles sinergias, jugadores que puedan salir o llegar cedidos, y mucho que aprender los unos de los otros», explicó.
Rastar como socio estratégico
En cuanto al antiguo propietario, Pace confirmó que Rastar seguirá siendo un socio estratégico, aunque sin involucrarse diariamente en la gestión del club. «Mao Ye continuará como CEO, y eso es lo más cerca que Rastar estará del día a día del club», afirmó, destacando la importancia de la figura de Ye en el nuevo Consejo de Administración blanquiazul.
Perspectivas de futuro
Sobre la posibilidad de alcanzar la Liga de Campeones, Pace adoptó una postura cautelosa. «Si se llega a la ‘Champions’, será buenísimo, pero no es bueno poner fechas. Las intenciones del señor Chen eran las mismas que las nuestras: ayudar al club a ganar», matizó. «No sé si vamos a ganar la ‘Champions’ o jugarla, pero nuestra meta es ganar en todo momento», añadió.
Oportunidades de crecimiento global
Finalmente, el nuevo presidente destacó las oportunidades de crecimiento del Espanyol a nivel global. «El Barça ha crecido mucho gracias a la gente fuera de Barcelona. Nosotros también podemos aprovechar el turismo y la afición internacional, pero debemos hacernos visibles. Hay muchas maneras de introducir el Espanyol al mundo y podemos crecer así», concluyó.
Pace cerró su presentación recordando su conexión personal con Barcelona. «Hace treinta años vine a Barcelona recién casado, y ahora volver es como una segunda luna de miel. Este lugar siempre ha sido especial para mí», finalizó, reflejando su entusiasmo por el nuevo capítulo que comienza al frente del RCD Espanyol.