El Grupo Parlamentario de Vox ha instado este jueves al Gobierno regional a que acometa obras de limpieza, conservación y mejora de cauces, mientras que el PP ha criticado el «total abandono de la planificación hídrica y medioambiental» por parte del Ejecutivo regional, y el PSOE ha defendido que la Junta «trabaja, actúa e invierte en planificación hidrológica».
Ha sido durante un debate general sustanciado en las Cortes sobre el mantenimiento de los cauces de ríos y arroyos de Castilla-La Mancha, en el que ha intervenido en primer lugar el presidente del Grupo Parlamentario Vox, David Moreno, que ha considerado urgente «actuar» y, sobre todo, invertir en ese ámbito.
A su juicio, si estas obras no se ponen en marcha los cauces se convertirán «en auténticos bosques» que luego van a causar atascos «que provocan incluso que los desbordamientos sean aún superiores». Dicho esto, ha preguntado al Ejecutivo regional qué ha hecho durante estos diez años y qué obras de encauzamiento ha ejecutado «para preservar la seguridad de las personas ante avenidas de agua o lluvias abundantes como las que se están viviendo» actualmente.
Además, ha apuntado que el Ejecutivo debe «elegir entre esa ley de restauración de la naturaleza que pretende continuar derribando presas y azudes o aplicar el sentido común», que es el que indica, a su juicio, que «necesitamos un Plan Nacional del Agua, un Plan Nacional del Agua que planifique» y en el que se consolide «una planificación en cuanto a las necesarias obras de encauzamientos, de limpieza, de desbroce de las riberas, de los cauces, de los ríos y de los arroyos».
Desde el PP, el parlamentario Ignacio Redondo ha señalado que la limpieza de cauces y riberas «debe implicar la colaboración de todas las administraciones y la ayuda, en particular, a los ayuntamientos», considerando que el Gobierno regional «ha pedido a las confederaciones hidrográficas realizar labores de limpieza para prevenir catástrofes naturales, pero lo ha hecho con la boca pequeña» sin hacer «la presión que, como máxima administración de Castilla-La Mancha, se le espera».
También ha considerado «fundamental» que los ayuntamientos puedan actuar en los tramos urbanos, pero muchos no tienen ni los medios ni los recursos necesarios y «necesitan el auxilio de la Administración de la Junta». Además, la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, dependiente de la Consejería de Desarrollo Sostenible, «tiene la obligación de coordinarse con las confederaciones y exigir actuaciones inmediatas para la limpieza y así disminuir el riesgo de inundaciones».
Dicho esto, Redondo ha arremetido contra el «total abandono de la planificación hídrica y medioambiental» por parte del Ejecutivo regional, convencido de que «no existe un plan regional de limpieza de cauces que garantice actuaciones periódicas, especialmente en las zonas rurales, donde el riesgo es mayor y están más desatendidos» y criticando que «la falta de inversión es crónica».
«Necesitamos una colaboración decidida e inmediata de la Junta de Comunidades y las confederaciones hidrográficas para una gestión integral de los recursos hídricos, que priorice tanto la seguridad de las personas como la conservación de los ecosistemas y la protección de los cultivos, teniendo presente la ayuda de los ayuntamientos y su protección frente a sanciones desmesuradas», ha concluido.
El socialista Francisco José Barato ha comenzado su intervención valorando que las lluvias de las últimas semanas estén provocando un incremento significativo en las reservas de agua de los embalses y pantanos, «alcanzando niveles que no veíamos desde hace años», y defendiendo a continuación la acción «ejemplar en su respuesta» del Ejecutivo regional en este contexto.
Barato ha incidido en que la limpieza de cauces y arroyos no es una competencia exclusiva de una única administración sino que involucra a varias, y ha recordado que también la aprobación de la Directiva Marco del Agua europea «ha supuesto un cambio de paradigma sobre la manera en la que se deben gestionar los recursos hídricos».
Igualmente, ha criticado las propuestas de Vox al debate, que evidencian «un desconocimiento técnico y normativo que les lleva a proponer ideas simplistas» y, en algunos casos, «propuestas que ya se están ejecutando», porque «el Gobierno de Castilla-La Mancha trabaja, actúa e invierte en planificación hidrológica».
El debate lo ha cerrado la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, que aunque ha coincidido en algunos de los planteamientos expuestos durante el debate, ha admitido que los ayuntamientos a veces tienen «falta de capacidad tanto técnica como económica» para acometer algunas infraestructuras; pero ha señalado que además de llamar al Gobierno de Castilla-La Mancha también hay «un ente intermedio» que se llama Diputación Provincial.
«Es muchísimo más lo que hace este Gobierno regional por sus ciudadanos y por sus municipios que desde luego lo que se está haciendo en ninguna otra región», ha concluido, ofreciendo «mano tendida», antes de avanzar que, de cara al cuarto ciclo de planificación hidrológica, el Ejecutivo castellanomanchego llevará a la Mesa regional del Agua sus propuestas y confía en las que presenten los demás.
RESOLUCIONES
La resolución presentada al debate por Vox –rechazada por los votos de la mayoría socialista y la abstención del PP- instaba al Gobierno regional a Ejecutar las obras necesarias para la limpieza y conservación de cauces arroyos y riberas que sean de su competencia, a programar aprobar y tramitar inversiones en materia de encauzamiento y defensa de márgenes en las áreas urbanas; pero también a las confederaciones hidrográficas a cumplir su competencia.
También pedía Vox al Gobierno de la Nación la elaboración y aprobación de un Plan Nacional de Agua; realizar un inventario de todas las obras hidráulicas de su competencia y una estimación del plazo de finalización de ejecución de las mismas, y a revisar el cumplimiento de los tratados internacionales con Portugal para comprobar que no se vierte al mar «más de lo necesario».
El PP, en su propuesta de resolución –que tampoco ha salido adelante al contar con la abstención de Vox pero no con apoyo del PSOE– apremiaba al Gobierno regional a instar al Gobierno de España a la «inmediata intervención de las confederaciones hidrográficas con el objeto de proceder a las obras necesarias para asegurar la limpieza de los cauces», y a «acometer de inmediato en el marco de sus competencias las obras necesarias para garantizar el correcto mantenimiento de cauces arroyos y riberas incrementando las partidas presupuestarias».
También defendía redactar un Plan de Obras Hidráulicas de cobertura regional, y a liderar la redacción y puesta en marcha de un plan de acción conjunto con las confederaciones hidrográficas de la región y los municipios impulsando proyectos que combinen la restauración de los ríos con la seguridad hídrica y la protección de los cultivos e infraestructuras a través de fondos europeos.
La única propuesta de resolución al debate que ha salido adelante ha sido la del PSOE –con sus únicos votos a favor, en contra del PP y la abstención de Vox–, instando al Gobierno regional a que solicite a las confederaciones hidrográficas el mantenimiento adecuado de los cauces y ríos de cauces de ríos y arroyos en los tramos no urbanos y que regularice su limpieza a través de un plan continuado.
De la misma forma, solicita a las diputaciones provinciales que establezcan ayudas técnicas y económicas para que los municipios por cuyos tramos urbanos discurran ríos o arroyos dispongan de apoyo suficiente para la adecuada limpieza de los cauces.