La Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha ha llevado a cabo un curso de reciclaje formativo este sábado, dirigido a miembros de grupos de emergencia que ya poseen conocimientos en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y en el uso del desfibrilador automático (DEA).
Asistencia del director general de Protección Ciudadana
El director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig, estuvo presente en el inicio de esta formación, que reunió a un total de 21 participantes. Este curso se enmarca dentro del ámbito de la medicina de urgencias y tiene como objetivo fundamental recordar y practicar los conocimientos básicos necesarios para realizar la resucitación cardiopulmonar en cualquier persona que pueda sufrir un infarto, utilizando además el desfibrilador automático (DEA), según informa el Ejecutivo regional en una nota de prensa.
Contenido del curso y formación práctica
Durante la jornada, los asistentes profundizaron en el reconocimiento de la parada cardiorrespiratoria y en la gestión de la situación tanto en intervenciones individuales como en escenarios con dos intervinientes, donde se desarrollan los roles de líder y acompañante. Asimismo, se incluyó formación práctica sobre el manejo de la vía aérea, el uso del DEA y la combinación de soporte de la vía aérea con el DEA en situaciones con uno o dos primeros intervinientes.
Participantes de diversas localidades
Los alumnos que tomaron parte en esta actividad formativa pertenecen a diferentes agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de la provincia de Toledo. Entre los municipios representados se encuentran Ajofrín, Barcience, Burguillos de Toledo, Camarenilla, Casarrubios del Monte, Cedillo del Condado, Fuensalida, Méntrida, Portillo de Toledo, San Bartolomé de las Abiertas, Toledo capital, Torrijos, Valmojado y Yuncos.
Ediciones del curso a lo largo del año
Este curso se llevará a cabo en cuatro ediciones a lo largo del año, siendo la de noviembre la segunda. El propósito es que un gran número de integrantes de los grupos de emergencia sean capaces de realizar una primera intervención sanitaria relacionada con la reanimación cardiopulmonar, garantizando así la seguridad del paciente.
