La Guardia Civil ha llevado a cabo una operación conjunta con las policías locales de Caravaca de la Cruz y Calasparra que ha resultado en la detención de siete individuos presuntamente involucrados en robos con fuerza. Este grupo criminal, de carácter itinerante, está compuesto por seis hombres y una mujer, todos ellos con edades entre los 20 y 27 años, y originarios de Madrid y Toledo.
Inicio de la investigación
La investigación comenzó cuando la Policía Local de Caravaca de la Cruz detectó un vehículo que circulaba de manera sospechosa alrededor de un conocido restaurante en la localidad. Este coche llegó a transitar en dirección contraria, y tras estacionar, sus ocupantes ingresaron al establecimiento.
Identificación del vehículo robado
Los agentes realizaron las averiguaciones pertinentes y comprobaron que el vehículo había sido robado en Torrejón de Ardoz, Madrid, en julio pasado. Ante esta situación, se estableció un dispositivo conjunto para identificar a los presuntos delincuentes. Resultó curioso para los agentes que, a pesar de estar en el mismo coche, los integrantes del grupo se sentaron en diferentes mesas dentro del restaurante, tratando de simular que no se conocían.
Intento de ocultar pruebas
Al percatarse de la presencia policial, dos de los detenidos, un hombre y una mujer, se dirigieron al baño donde escondieron las llaves del vehículo robado y deshicieron de otros objetos que podrían incriminarlos.
Historial delictivo
Cuando los agentes iniciaron la identificación, todos alegaron no portar documentos. Sin embargo, al investigar sus identidades, se descubrió que contaban con un extenso historial delictivo, especialmente por delitos contra la propiedad en diversas provincias españolas. Además, se reveló que dos de ellos habían llegado en taxi desde Calasparra, donde se habían hospedado en una casa rural, usurpando la identidad de otra persona.
Incautación de herramientas
Durante la operación, a estos dos individuos se les incautó una bolsa con pasamontañas, guantes, navajas, destornilladores y otras herramientas que se presume utilizaban para forzar cerraduras. Asimismo, se localizó un coche de alquiler que no había sido devuelto a la empresa arrendataria, el cual fue hallado por la Policía Local de Calasparra en las cercanías de la casa rural donde habían pasado la noche.
Resultado de la operación
La investigación culminó con la detención de los siete sospechosos, quienes son acusados de los delitos de robo de uso de vehículo a motor, apropiación indebida y usurpación de estado civil. Los dos vehículos recuperados han sido devueltos a sus legítimos propietarios.
