El Fiscal General del Estado, Álvaro García, y la presidenta del Consejo de Estado, Carmen Calvo, han protagonizado este miércoles un acto de homenaje a la Constitución organizado por la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha en el que han apuntado y criticado los ataques y los actos de deslegitimación a las instituciones.
Un evento que, según ha anunciado la delegada de Gobierno, Milagros Tolón, en ese evento, se repetirá en los próximos años coincidiendo con la celebración del aniversario de la Constitución.
Durante su intervención, el Fiscal General ha defendido la importancia de las instituciones y su puesta en valor. «A veces, cuando minimizamos, cuando hacemos de menos las figuras, los órganos constitucionales, en realidad nos estamos pegando un tiro en el pie porque estamos diciendo que no es importante o que esas instituciones no son importantes», ha afirmado. «Lo son, lo son y mucho», ha añadido.
Una reflexión que ha ligado a la funcionalidad de la Fiscalía, apuntando a su configuración en la Transición tras la dictadura.
En este sentido, ha señalado que la intención de la Asamblea Constituyente que derivó en la Constitución de 1978, «es diferenciarlo del Fiscal de la dictadura claramente».
Así, ha afirmado que, en su nueva configuración, se instituyó como un «órgano autónomo» relacionado con el poder ejecutivo, pero no dependiente de este, especificando que en la Constitución esta autonomía del Gobierno se «da por hecho» y «de quien dice que es autónomo, literalmente, es del poder judicial».
Por otra parte, Álvaro García ha reivindicado la «educación» de la sociedad para perpetuar su valores en generaciones futuras.
Por su parte, Carmen Calvo ha señalado que es necesario «insuflar los valores democráticos que están en nuestra Constitución» y alejarse de los ataques a los valores democráticos que se producen en «algunos debates jibarizados, pequeños, destructivos y básicos».
DEFENDER LOS VALORES DEMOCRÁTICOS
La presidenta del Consejo de Estado ha señalado que en ocasiones se habla de «de democrático y antidemocrático de una manera tan ficticia que no valora en absoluto que vivimos en la sociedad seguramente más desarrollada del mundo, con los derechos y las instituciones».
En este sentido, ha planteado la necesidad de defender los valores democráticos ya que «detrás de la democracia solo puede venir algo muy antiguo, que es una dictadura».
«Hay quien la ataca porque no cree en ella, sobre todo porque no cree que seamos todos iguales», ha advertido. «La democracia es muy compleja, es tan compleja como que a la humanidad le ha costado miles de años desarrollar la idea y ponerla en práctica y eso requiere además de un respeto por el esfuerzo que a la humanidad le ha costado llegar hasta aquí y empezar a practicarla», ha añadido.
Además, Calvo ha puesto en valor la perduración y la vigencia de la Constitución de 1978, asegurando que sus 46 años constituyen «los mejores de los últimos 200 años en España».