El secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, Javier Ortega, se ha reunido con los coordinadores regionales del Movimiento Sumar en Castilla-La Mancha, María Rodríguez y Jesús Plaza, para tratar temas de interés común que ocupan y preocupan a ambas organizaciones, que han mostrado sintonía en cuanto al diagnóstico de la situación de la región y las medidas a implementar.
Un encuentro que se ha desarrollado en la sede del sindicato y que ha contado también con la participación del secretario regional de Política Institucional y Desarrollo Territorial, José Manuel Muñoz, y la secretaria de Mujeres, Igualdad y Juventud de CCOO en la región, Ana Villaseñor, según ha informado el sindicato en nota de prensa.
Uno de los asuntos que se ha abordado es la reducción de la jornada laboral a las 37,5 horas, compartiendo ambas organizaciones la necesidad de reducir el tiempo de trabajo en nuestra comunidad autónoma, a la vez que lamentan el aplazamiento del debate de las enmiendas a la totalidad al proyecto de ley, acordado por el Gobierno y los sindicatos mayoritarios, que establece la jornada máxima legal en 37,5 horas semanales y que estaba previsto para la próxima semana, en concreto para el día 22 de julio.
Una medida que supone avanzar en la consolidación de derechos laborales, que permitirá mejorar la conciliación familiar y personal y el bienestar de las personas trabajadoras, así como el aumento de la productividad y la creación de empleo.
Diferentes empresas contemplan ya jornadas laborales por debajo de las 40 horas semanales, si bien otras siguen con condiciones laborales de 1983, con «larguísimas y extenuantes» jornadas laborales y por cuestiones como la ausencia de representación sindical.
Para CCOO, si el proyecto de Ley sigue estancado, en otoño podría producirse un estancamiento de la negociación colectiva, lo que aumentaría la conflictividad laboral en la región y en el conjunto del país ya que, alegan, muchas patronales se escudan en la falta de claridad legislativa para frenar avances.
En la reunión se abordaron otros asuntos como las dificultades de la clase trabajadora para poder acceder a una vivienda y de las personas más jóvenes para poder emanciparse, debido al alto coste de la misma que hace que tengan que llegar a destinar más de la mitad de los ingresos a los gastos de vivienda. CCOO y el Movimiento Sumar comparten la necesidad de buscar fórmulas que hagan accesible el derecho a una vivienda digna y adecuada.
Tras los últimos incidentes de violencia, odio y xenofobia hacia las personas migrantes en la localidad murciana de Torre Pacheco, CCOO y Sumar coinciden en manifestar su «más absoluto rechazo y condena» hacia estas agresiones, así como también al genocidio de Israel contra el pueblo palestino con más de 62.000 palestinos muertos, entre ellos 17.500 niños y niñas.
Por otro lado, la defensa de unos servicios públicos de calidad y universales como elementos fundamentales para garantizar los derechos de la ciudadanía ha sido otro de los puntos en los que coindicen ambas formaciones, que apuestan por seguir impulsando y fortaleciendo el diálogo social en la Comunidad Autónoma.