La atleta española Marta García confiesa que con el paso de los años durante su carrera ha «perdido un poco de competitividad como método de autoprotección», después de aprender a «gestionar» las emociones, porque «si la vida es una competición todo el rato, es muy cansado», al mismo tiempo que defiende que, por ser en Madrid, el equipo español tendrá «resultados por encima del rendimiento habitual».
«Después del primer bloque de competiciones, pues sabemos que estamos en un buen estado de forma y ahora con el plus de correr aquí en casa, creo que va a ser muy especial y eso nos da un plus», consideró la deportista en una entrevista a Europa Press en el Madrid Marriot Auditorium.
La leonesa, de 27 años, se mostró tranquila, relajada y esperando el momento de competir. «Nunca hemos corrido un campeonato internacional en casa, creo que nadie de la selección, eso le va a dar el plus. En París 2024 se me ponían los pelos de punta cuando alguien en la pista, algún francés, decían su nombre y la gente se volvía loca. Espero, ojalá, poder sentir lo mismo este fin de semana en Vallehermoso», deseó.
García confesó que le hace «especial ilusión» este Europeo por Equipos en el recinto madrileño, porque el atletismo es «un deporte individual» y ahora deberán sumar puntos para un resultado final en grupo. «Yo siempre he sido una persona muy de equipo, de hecho en mi grupo de entrenamiento suelo entrenar mejor con el grupo. Y creo que puedo dar un éxito en carrera pensando que no lo hago por mí, si no por alguien más. Ese sentimiento de equipo va a ser guay y nos va a aportar algo positivo», celebró.
La leonesa competirá este viernes en la prueba de 5.000 metros con «rivales muy fuertes», pero sabe que en una carrera puede pasar cualquier cosa y se decidirá por detalles. «Hay que correr, hay que estar ahí ese día y hay que ganar. Creo que puedo darle bastantes puntos al equipo, ojalá sea así. Y a nivel equipo, ojalá podamos estar en el podio», dijo.
«Tenemos bajas importantes, sobre todo, en el triple salto masculino, femenino, alguna otra prueba. Pero imagino que todos los equipos también tienen alguna baja. Es muy complicado que todo el equipo esté a tope, sin dolores, sin molestias, pero me quedo con ese plus de hacerlo en casa y yo creo que vamos a tener resultados por encima de nuestro rendimiento habitual», agregó Marta García, que espera un fuerte apoyo desde la grada.
No obstante, García confesó que los 5.000 m «es una prueba bastante incómoda, bastante complicada» para ella. «Sin duda, es la prueba que más sufro, pero está bien, porque no solo se corre con las piernas, también se corre con el componente mental, con la táctica de carrera, te da tiempo a crear un poco… En pruebas más cortas, al menos a mí, te quedas con las ganas un poco de más. Pero es la prueba que más se ajusta a mis condiciones y le voy pillando el tranquillo», analizó.
En 5.000 m, García fue bronce en el Europeo de Roma del año pasado, y a principios de este mes de junio se estrenó en esta distancia al aire libre con un undécimo puesto en la Liga Diamante logrando la mínima para el Mundial de Tokio del mes de septiembre. Y confía también en condiciones favorables este viernes para dar la campanada.
«LA SAN SILVESTRE VALLECANA ES UNO DE LOS MEJORES MOMENTOS DE MI CARRERA»
«Cada carrera es un mundo, dependiendo de si es una carrera táctica, una carrera de campeonato, como lo que se puede dar este fin de semana, o si es una carrera rápida, planteamos cosas diferentes. Sí que suelo pensar un poco antes de la carrera, ideas, cosas que quiero hacer. A lo mejor más en términos generales, no de imaginarme exactamente», reveló sobre su estrategia antes de una carrera.
Y este 2025 comenzó de la mejor manera, después de lograr el triunfo el 31 de diciembre de 2024 en la San Silvestre Vallecana, la primera española en lograrlo desde 2008, en «uno de los momentos más bonitos» de su carrera deportiva. «Jamás me imaginé esa sensación de que digan tu nombre, de que se te pongan los pelos de punta, de que te griten a ti y que te empujan hacia adelante», rememoró.
«Todo el mundo sentía una ilusión especial de ver a una española, como hacía muchos años que no pasaba, en cabeza en la San Silvestre Vallecana, en una carrera con tanta historia, con tanto prestigio. Yo estaba un poco en una nube, pero sí que recuerdo haber podido disfrutar, a pesar de estar sufriendo, esa cuesta de Vallecas, de escuchar a la gente ilusionada», agregó.
Y esta Marta García ha evolucionado como atleta. «He perdido un poco de competitividad como método de autoprotección, porque cuando era pequeña tenía ese hambre de ganar todo y si no te pillabas una rabieta. Y más si estabas acostumbrado a ganar. De hecho, también recuerdo el primer día que quedé segunda, que fue bastante duro y lloré un poco, y de hecho creo que fui a mis padres a decirles que ya no quería correr más», reveló.
«Esas son las cosas que te ayudan, que te enseñan, que te hacen humilde también. Y según han pasado los años, he aprendido a competir solo donde debo competir, que es en la pista, no competir en los entrenamientos, porque al final, si la vida es una competición todo el rato, es muy cansado. Entonces he aprendido a gestionar eso que de pequeños pues cuesta más gestionar», relató.
Y es que los deportistas de élite están «un poco obsesionados». «No me gusta esa palabra porque suena un poco patológica, pero realmente el deporte de elite no es solo el tiempo en la pista, es un estilo de vida. Son las 24 horas pensando en ese momento de máximo rendimiento. Cada vez que le das una cuchara a la comida, cada vez que haces un plan o que lo dejas de hacer, estás pensando en el rendimiento», comentó.
Finalmente, Marta García agradeció que el Mundial de Tokio sea en septiembre después de un 2024 en el que acabó «bastante cansada, sobre todo emocionalmente». «Aunque fueran emociones positivas, porque cansa mucho, incluso más que las negativas, el 2025 lo empecé en un modo más ‘chill’, más tranquilo, intentando entrenar con mucha calma», dijo.
«Lo que pasa es que luego llegas a la pista y ya te ves cerca de tus marcas o de tu máximo rendimiento y ya te entran las prisas y ya te entra la rabia otra vez y las ganas de estar a tu máximo nivel. Pero a mí me gusta la idea de septiembre, he empezado poquito a poco, me ha dado tiempo a resetear un poco el cuerpo», concluyó.