El mandamás de LaLiga, Javier Tebas, ha expresado su convicción de que el Gobierno carece de «competencia» para vetar el enfrentamiento entre Villarreal CF y FC Barcelona en Miami, Estados Unidos, programado para el 20 de diciembre. Tebas aseguró que el objetivo de LaLiga es celebrar «un partido al año» fuera de España, considerándolo una manera eficaz de promover el fútbol europeo y subrayó la necesidad de su reglamentación.
«El Gobierno, en nuestra opinión, no tiene jurisdicción sobre esto. La normativa es inequívoca y no prevé nada más. La UEFA y la Federación podrían rechazar el partido bajo las normas actuales, pero el Gobierno no tiene competencia en este asunto», explicó Tebas durante la presentación del documental ‘LaLiga Genuine Moeve’ el lunes.
Tebas instó al Consejo Superior de Deportes (CSD) a «aplicar el Estado de Derecho» y manifestó su creencia de que no habrá problemas con la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), la cual «solo busca información» y ya tenía «un acuerdo» cuando se propuso por primera vez la idea de jugar en Estados Unidos en 2018.
El líder de LaLiga afirmó que no habrá compensación económica para los equipos involucrados ya que el promotor es ‘Relevant’. «Los clubes son los que deben solicitar jugar partidos oficiales en el extranjero y ahí comienza el proceso. Si bien es un producto que nos agrada y que promovemos, no pediremos un euro. Podemos ofrecer ayuda o asesoramiento, por supuesto», detalló.
Tebas enfatizó que solo planean realizar «un partido al año» y que «no todos» están interesados en hacerlo. «Pero creemos que hacerlo una vez al año es una forma de mostrar respeto a nuestros seguidores en todo el mundo. Podemos llevarlo a Estados Unidos, Asia, Buenos Aires u otros lugares», agregó.
El presidente de LaLiga insistió en que el objetivo no es el beneficio económico, sino la promoción de la marca al estilo de la NBA o la NFL cuando organizan partidos en Europa. También abogó por la reglamentación de este tipo de partidos, limitando la cantidad permitida por liga.
Tebas defendió la idea de llevar un partido de LaLiga fuera de España, argumentando que no va en contra de la tradición, sino que la fomenta. Confirmó que ya han establecido «contactos» con la CONCACAF, que debe dar su aprobación para el encuentro.
Por último, se refirió a la Superliga, celebrando que el FC Barcelona parece haber abandonado «un proyecto que habría causado un gran daño al fútbol nacional» para acercarse a la ECA, ahora conocida como Clubes Europeos de Fútbol. Aseguró que no considera que haya ganado ninguna batalla a Florentino Pérez sobre este tema y calificó la Superliga como «la crónica de una muerte anunciada».