El centrocampista del Real Madrid Fede Valverde ha asegurado que el croata Luka Modric «jamás ha puesto una mala cara» a pesar de su actual rol de suplente en el conjunto blanco, afirmando que es «un guerrero dentro del fútbol», y cree que el inglés Jude Bellingham puede llegar a ser «un capitán que marque una época» dentro del equipo.
«Luka Modric es un referente en el vestuario desde el primer día que llegué y lo sigue siendo, por más que no esté teniendo los minutos que seguramente él quiera o necesite. Todos tiramos para el mismo lado y él jamás ha puesto una mala cara, y eso habla muy bien de él como jugador y como persona. Siempre ha sido lo más competitivo que he visto en el mundo del fútbol», declaró en la rueda de prensa previa al partido de Liga de Campeones de este martes ante el Nápoles.
En este sentido, lo calificó como «un guerrero dentro del fútbol». «Es de admirar por todo lo que ha pasado. Sigue haciendo historia en el Real Madrid y en el fútbol con tantos años. Es un ejemplo para todos, sobre todo para los jóvenes, que nos alimentamos de él y de otros jugadores como él dentro del vestuario. Hay que sacarle el mayor fruto posible y seguir aprendiendo hasta el último día que juegue al fútbol. Hay que disfrutarlo, y cuando le toque, ojalá lo haga de la mejor manera», expresó.
Además, el internacional uruguayo explicó todo lo que ha aprendido del croata y del resto de sus compañeros del centro del campo desde que recaló en el club madridista. «Desde el primer día que llegué fue un mediocampo increíble; cuando yo llegué estaban Case -Casemiro-, Toni -Kroos- y Luka -Modric-, y también estaba Isco de ’10’, suelto. Me pareció el mejor mediocampo de la historia del fútbol. He tratado de aprender mucho de cada uno de los jugadores, cada uno tiene sus virtudes, pero son de los mejores de la historia», expuso.
«Cuando estás en el día a día con cada uno de ellos intentas escucharlos, mirarlos para seguir creciendo como futbolista. Tuve la oportunidad de vivirlo con Casemiro, de alimentarme de muchos códigos y valores dentro del Real Madrid que me hicieron madurar mucho. Es muy difícil jugar acá, están los mejores jugadores del mundo. Hoy estoy jugando y tengo que valorarlo y mostrarle a los jóvenes lo mismo que me mostraron a mí cuando llegué al Real Madrid», prosiguió.
También alabó al inglés Jude Bellingham. «Los jugadores que están destinados a marcar una época tienen las características que tiene Jude. Llegar a un equipo tan joven es otro escalón muy arriba, llegó de buena forma, lo afrontó de una increíble manera. En el día a día, parece un jugador muy maduro que lleva muchísimos años jugando en el Real Madrid. Además, sabemos lo gran jugador que es. Como persona también es especial, es muy bueno, muy buen compañero, tiene la cabeza muy bien amueblada, el círculo que le rodea le habla muy bien y es muy positivo. Seguramente pueda llegar a ser un capitán que marque una época dentro del Real Madrid», subrayó.
En otro orden de cosas, Valverde no ocultó su «sueño» de poder portar algún día el brazalete de capitán. «Es un sueño desde que llegué, desde que firmé por el Real Madrid, poder ser esa imagen y ese ejemplo para mucha gente en el mundo que ama al Real Madrid, poder ser ese espejo que ahora son Dani Carvajal, Luka Modric o Toni -Kroos-. Nos miramos en ellos, copiarles. Me encantaría ser capitán, lo he sido en Uruguay y es una de las sensaciones más bonitas que he vivido en mi vida. Me encantaría poder ser capitán del Real Madrid», manifestó.
Por otra parte, rememoró todo lo vivido el pasado curso. «En lo personal y familiar, no voy a recordarlo, porque mi mujer y yo vivimos momentos duros, momentos que no le deseo a nadie y que no son bonitos de pasar. Son cosas de la vida, que te va poniendo obstáculos; hay que intentar ser lo más positivos posibles, tener mucha fe», indicó.
«Intenté centrarme en el fútbol, intenté centrarme en el Mundial, que no fue de la manera que yo quería; intenté centrarme en el Madrid y ganar todo lo posible; hemos ganado la Copa del Rey y eso fue un cierre de año muy lindo que me hizo olvidar todo lo malo que vivimos. Me hizo crecer mucho y madurar como persona. Hay momentos que uno no se espera, pero hay que salir adelante y estar junto a la gente cercana, que te da ese plus para seguir confiando en la vida y seguir trabajando al máximo», añadió.
Además, confesó sus sensaciones con el nuevo sistema de rombo empleado por Carlo Ancelotti. «Me estoy sintiendo mejor que nunca. Jugar cada partido demuestra que estoy haciendo las cosas bien. Cuando estás acostumbrado a jugar en una formación, que cuando llegué al Real Madrid era 4-3-3, siempre te intentas adaptar y seguir aprendiendo. Con un entrenador así, tienes que escucharlo. En lo personal, creo que estoy haciendo las cosas bien, sigo aprendiendo, creciendo. A veces cuesta, porque hay partidos en los que atacas más y cuesta replegar, y hay otros equipos que también te saben atacar, como el Girona, y tenemos que cambiar de formación y jugar de otra forma. Esto es parte del fútbol», señaló.
Por último, Valverde valoró el partido de este martes ante el Nápoles. «Es muy importante seguir por la senda de la victoria en ‘Champions’ contra un rival histórico en el mundo del fútbol. Estamos ilusionados, con muchas ganas de que llegue mañana, de seguir ganando y de poder irnos a la selección de buena forma», finalizó.