El piloto español de Fórmula 1, Carlos Sainz, que compite con el equipo Williams, no tuvo una buena experiencia en el Gran Premio de México, al calificar su actuación como «un desastre». Desde la primera curva, donde sufrió daños en su monoplaza, se vio privado de cualquier opción competitiva a pesar de haber mostrado un buen ritmo en la pista.
Problemas en la primera curva
En declaraciones a Dazn, Sainz comentó sobre la complicada situación que vivió: «Ha pasado de todo, un desastre porque no hemos salido mal, pero ha habido una melé en la curva uno. Nos hemos tocado entre todos, ha dañado mi llanta delantera izquierda». Además, el piloto español se enfrentó a problemas técnicos, ya que los sensores del límite de velocidad para la entrada al ‘pit-lane’ se rompieron, lo que le llevó a recibir sanciones cada vez que entraba a boxes. «Se nos ha ido la carrera», lamentó.
La sanción de Austin como lastre
Sainz también se refirió a la sanción de cinco puestos que recibió tras el Gran Premio de Austin, a la que calificó de «desproporcionada». Esta penalización le obligó a iniciar la carrera en la duodécima posición, aumentando el riesgo de problemas durante la salida. «Hoy tenía buen ritmo. Al final, la penalización de ayer y la curva uno nos han causado el resto de problemas», explicó tras su abandono en la penúltima vuelta en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Reflexiones sobre el rendimiento del coche
El madrileño concluyó su análisis afirmando: «Hay que seguir en la buena línea con el coche, si hubiese salido más adelante este problema no nos hubiese tocado. La penalización de Austin es lo que nos ha costado aquí el fin de semana».
