El barrio de Santa María de Benquerencia ha sido seleccionado como escenario para la prueba piloto del nuevo contenedor marrón destinado a residuos orgánicos. Desde inicios de octubre, se han distribuido 80 contenedores en diversas ubicaciones del barrio, acompañados de una intensa campaña informativa entre los vecinos.
El objetivo de esta iniciativa es cumplir con la normativa europea sobre recuperación de residuos, que promueve la separación y reciclaje de la fracción orgánica. En este sentido, el Ayuntamiento de Toledo ha proporcionado a los vecinos guías prácticas sobre los residuos que deben depositarse en el nuevo contenedor. Además, continúa el reparto de materiales informativos directamente en los buzones, facilitando el aprendizaje y la adaptación de la comunidad a este nuevo sistema.
El proyecto se implementa con un sistema de pre-recogida y carga lateral que evita el contacto directo con los contenedores. Mediante el sistema hidráulico «Vacri», los contenedores serán volteados automáticamente, ofreciendo una recogida más eficiente, cómoda y segura para los usuarios.
Asimismo, se recuerda a los vecinos la importancia de depositar los residuos en bolsas cerradas, evitando así la proliferación de olores desagradables y posibles plagas. Este contenedor está diseñado específicamente para residuos similares a los generados en el hogar, y pretende optimizar el espacio disponible para la gestión de basura en las zonas de alta demanda del barrio.
La colaboración de los residentes de Santa María de Benquerencia resulta clave para el éxito de esta fase inicial, que se vislumbra como un hito para el futuro de Toledo en materia de gestión de residuos y sostenibilidad.