El Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona ha decidido procesar al exfutbolista del Espanyol, Álvaro Aguado, tras hallar indicios de un presunto delito de agresión sexual con penetración. Este incidente supuestamente ocurrió en la madrugada del 24 de junio en una discoteca ubicada en el paseo marítimo de la ciudad condal, durante la celebración del ascenso del equipo a la primera división.
Indicios del caso
Según el auto al que ha tenido acceso Europa Press, la jueza ha considerado varios indicios que respaldan la acusación. En primer lugar, está la declaración judicial de la víctima, quien mantiene una versión coherente con la que ofreció ante la policía. Además, se ha tomado en cuenta el informe forense y los testimonios de testigos que corroboran los hechos ocurridos antes y después de la agresión, en particular, los mensajes enviados por WhatsApp y el estado emocional de la víctima.
Declaración del acusado
Por su parte, Aguado admitió haber mantenido relaciones sexuales con la víctima, aunque sostiene que estas fueron consentidas. A pesar de la gravedad de las acusaciones, la jueza ha decidido mantener al exfutbolista en libertad provisional.
Testimonio de la víctima
En su declaración, la víctima expresó haber sentido «incómoda, mareada y cansada», y afirmó que no deseaba bailar con Aguado. Relató que él la tomó de la mano y la llevó a la parte inferior de la sala, además de indicarle que le practicara sexo oral.
Versiones contradictorias
La jueza ha considerado también la relevancia de los testimonios de los amigos de la víctima, quienes fueron informados sobre lo sucedido y recibieron mensajes «inmediatamente posteriores» al incidente. La explicación de la denunciante cuenta con el respaldo del informe forense y parte de la documentación y testimonios, aunque estos últimos no confirman si hubo penetración.
Por otro lado, Aguado afirmó en su declaración que las relaciones fueron consentidas, argumentando que, en un primer momento, fue la víctima quien se abalanzó sobre él, y que se retiró al baño debido a que no se sentía bien, seguido por ella.