El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha enviado un mensaje a Vox, a quien le ha recordado que el «objetivo» de ambos partidos «tiene que ser que haya un cambio en Castilla-La Mancha para desterrar las políticas socialistas».
En una entrevista con Europa Press, ha avisado de que cada vez que Vox «se dedica a atacar al PP, se equivoca de enemigo». «El objetivo tiene que ser que Sánchez caiga en España y que el Gobierno de García-Page pase a la historia, cierre su ciclo y arranquemos uno nuevo».
En este punto, indica que él mismo, como máximo dirigente del PP, trata de «cultivar» las relaciones personales con otros partidos, también con Vox, para que «sean buenas».
«Yo trato de cultivar una buena relación con la dirección de Vox, como trato de cultivarla con el Partido Socialista», afirma, abundando en que su relación con el líder de los de Abascal en la región, David Moreno, así como con el resto de diputados autonómicos de esta formación o con la dirección nacional, es «buena».
Núñez, que descarta que otras opciones políticas como la marca Se Acabó la Fiesta lleguen a calar electoralmente en Castilla-La Mancha, ha confirmado que sin los números dan para formar Gobierno con Vox, así se hará.
EN INMIGRACIÓN, «NI RECHAZO GENERALIZADO, NI PUERTAS ABIERTAS»
Sobre la postura del Partido Popular en materia de inmigración, uno de los caballos de batalla más agitados por Vox, ha asegurado que su formación tiene «muy clara» la propuesta. «Ni rechazo generalizado ni apertura de puertas generalizada».
En su opinión, los inmigrantes que «vienen a trabajar, a integrarse y a participar en la sociedad» tienen que tener «todas las garantías y todos los derechos» para formar parte de la misma.
Pero, «el que viene a delinquir, a generar toxicidad, tiene que ser expulsado inmediatamente». «Y ese el criterio que tiene el PP en toda España y el que yo mantengo en Castilla-La Mancha».
En cuanto a los menores no acompañados, defiende que «no solo hay que atenderlos, sino además darles un itinerario» de adaptación pensando en cuando alcancen la mayoría de edad.
«Si no tiene un itinerario de formación y de integración, corremos el riesgo de que ese menor pueda tener un futuro complicado. No solo hay que atenderlo, darle de comer, darle sanidad, sino un itinerario para que se pueda integrar con normalidad en nuestra cultura o volver a su país».
IRÁ «HASTA EL FINAL» PARA ACLARAR SI EL CASO KOLDO AFECTA A C-LM
En otro orden de cosas, ha querido hacer referencia a los casos de corrupción que salpican al PSOE, indicando que la postura de su partido pasa en estos momentos por «pedir explicaciones» al Gobierno regional por las informaciones que apuntan a contrataciones con empresas que posteriormente fueron investigadas.
«Estamos en esa fase de preguntar por qué la trama de Ábalos y Santos Cerdán ha sido adjudicataria de obras del Gobierno de Page», asegura, añadiendo que si las respuestas del Ejecutivo castellanomanchego «no satisfacen», el PP llegará «a donde tenga que llegar».
Y es que, según recuerda, quien fuera presidenta de Adif y ahora imputada, Ana Pardo de Vera, «ha firmado convenios» en Castilla-La Mancha relacionados con el Plan X Cuenca, que lleva aparejadas distintas actuaciones tras la suspensión del ferrocarril convencional a su paso por la provincia. «Nos gustaría saber si el Gobierno de Page pone la mano en el fuego».
Sin dejar atrás este capítulo y sobre los supuestos pagos de Codere al despacho del exministro ‘popular’ Cristóbal Montoro, –empresa de la que el que fuera candidato del PP por la provincia de Cuenca, Rafael Catalá, tuvo relación–, se ha limitado a decir que la corrupción «hay que denunciarla, perseguirla y condenarla, venga de donde venga».
Por ello, «si alguien del PP ha cometido actos ilícitos, tiene que ser perseguido y condenado», afirmación que ha completado aseverando que el PP mantiene una «revisión permanente de ejemplaridad», y si algún episodio «no es ejemplar», el partido «actúa».
EL CASO DE VILLARROBLEDO «NO ES EJEMPLARIZANTE»
Se ha pronunciado en este punto sobre el postulado de un concejal del Partido Popular de Villarrobledo a un proceso de oposiciones municipales, lamentando que no ha sido un caso «ejemplarizante».
«No es ejemplarizante que alguien que está en un cargo público quiera optar a una plaza pública de la institución de la que él pertenece. El concejal se ha retirado del procedimiento y me parece que ha hecho lo correcto», afirma Núñez.