El seleccionador español masculino de baloncesto 3×3, Pedro Meléndez, ha asegurado que la medalla de oro conseguida por el equipo en el Mundial de Mongolia «debe suponer un despegue», y ha explicado que este éxito «exige mucha más responsabilidad».
«Parece que estamos en una nube todavía. Es una ilusión, una motivación. No estábamos dentro de los favoritos, pero cuando intentas hacer bien las cosas y tienes un grupo como ellos, que ha funcionado muy bien, campeones del mundo. Estamos muy ilusionados y muy contentos», señaló a los medios a su llegada con el equipo a la cena de celebración en Madrid por este histórico éxito.
También considera que este éxito «debe suponer un despegue». «La Federación Española está trabajando muy bien, pero el problema es que no podemos pasar de cero a cien en cuatro o cinco años, o en tres años que llevamos ahora mismo con todo esto. Nosotros en 2019 empezamos con el 3×3 Series; Diego de Blas es un jugador que sale de esa competición, Aurrecoechea también. Tiene que suponer un despegue», indicó.
«Hay muchos jugadores ya que están intentando dejar el 5×5 para dedicarse al 3×3, y desde nuestra parte debemos intentar ayudarles lo máximo posible para que pueda ser un despegue y poco a poco podamos alcanzar las cotas que muchos países europeos, sobre todo los masculinos, tienen con los jugadores profesionales del 3×3», añadió.
En otro orden de cosas, Meléndez es consciente de que la exigencia ahora será mucho mayor. «Esto empezó como ‘vamos a ver qué pasa’, pero ahora somos campeones del mundo. A lo mejor la sorpresa habría sido ya quedar en algún sitio un poco más bajo, no ser campeones del mundo desde el principio. Hay muchos jugadores y entrenadores que dicen «el día que os dediquéis al 3×3…'», subrayó.
«España va sonando, sobre todo gracias al camino que han hecho las chicas, que han hecho un camino extraordinario, porque han conseguido una medalla de plata olímpica y un Europeo. Nosotros ahora mismo, cuando vayamos a jugar la próxima competición, ya no seremos los que no estén dentro de los diez primeros del ranking, sino que estaremos un poquito más arriba, y eso exige mucha más responsabilidad por parte de todos», continuó.
Además, recalcó que los jugadores tienen que poder centrarse exclusivamente en el 3×3. «Yo te garantizo que tú pones a estos chicos, que pueden ser mejores o peores, entrenando una temporada 3×3, y puedes coger a cualquier jugador de baloncesto que juegue 5×5 y le van a ganar seguro. Si los que son mejores entrenaran también al 5×5, lo ganarían, pero no tiene nada que ver. De hecho, nosotros no hacemos un buen Preeuropeo, hacemos un Preeuropeo que es una castaña porque vamos muy poco rodados. Este Mundial nos viene bien de fechas, han jugado más, estamos más preparados y, desde luego, mucho más rodados y se nos ha dado mejor», manifestó.
Por último, explicó que el 3×3 en Mongolia «es una locura». «Yo no he visto nada igual en baloncesto 3×3, es increíble. De hecho, a ellos los conocen. Aparte de la pista donde jugábamos, tenían siete pistas más donde estaban jugando sin parar chicos y chicas. Es una auténtica barbaridad la afición que hay allí a este deporte. Muchos países no van a tener siempre 12 jugadores o jugadoras buenos de 5×5, pero en el 3×3 lo pueden hacer muy bien porque necesitas menos jugadores para hacer algo más competitivo. La diferencia, básicamente, es la adrenalina que te da; con un cuarto malo pierdes el partido, esa es un poco la dificultad de estar siempre en tensión», concluyó.